El Faro de la Entallada es uno de los faros más impresionantes y emblemáticos de la isla de Fuerteventura. Ubicado en el extremo sureste de la isla, en el municipio de Tuineje, el faro se encuentra en un acantilado a una altura de 200 metros sobre el nivel del mar, a cuarenta y ocho millas del Cabo de Jubi (África), ofreciendo impresionantes vistas panorámicas de la costa y del océano Atlántico.
Particularidades del Faro de la Entallada
El faro se construyó en 1953 en una zona rocosa y escarpada conocida como Punta de la Entallada y tiene una altura de 35 metros. Diseñado por el arquitecto Carlos Alcón, fue construido para evitar los peligros que acechaban a los barcos que navegaban por la costa de Fuerteventura.
Y es que, desde su construcción, ha sido un punto de referencia vital para los navegantes que atraviesan el Océano Atlántico y se acercan a las costas canarias. Aunque también hay que decir que ha servido no sólo para orientar a los barcos sino también a los aviones.
Detalles de su construcción
El edificio en sí, está proyectado en forma de U. Su fachada principal mira al mar y dentro alberga un patio interior orientado hacia el centro de la isla. Todo ello en una sola planta, con vivienda para el farero incluida. Además tiene tres torres cuadrangulares entre las que destaca la central, con una cúpula acristalada que se alza sobre los once metros. Y es desde su cúpula desde donde emite 1+2 destellos blancos cada dieciocho segundos que alcanza a treinta millas para avisar a los barcos y a quince kilómetros para los aviones. Por lo demás el Faro de la Entallada es particularmente llamativo por la piedra de sillería roja utilizada en las molduras, los zócalos y los arcos que lo visten.
Un pequeño museo naval en su interior
En 1987 fue automatizado, con lo que ya no se usa para vivienda del farero. El Cabildo de Fuerteventura lo rehabilitó más tarde creando en él un museo dedicado a señalizaciones marítimas. En la parte exterior se ha construido un mirador sobre el acantilado en el que el faro se encuentra y que posee unas impresionantes vistas del litoral majorero.
Hoy día, el faro sigue siendo un importante punto de referencia para los navegantes y una atracción turística popular para los visitantes de la isla.
Cómo llegar al Faro de la Entellada y qué puedes hacer allí
Los visitantes pueden llegar al Faro de la Entallada por carretera desde el pueblo cercano de Las Playitas, siguiendo la FV-20. Desde la carretera, hay un camino de tierra que conduce directamente al faro. Es larga, sinuosa y estrecha, pero vale la pena recorrerla porque las vistas panorámicas de la costa y del océano que ofrece son impresionantes.
Cuando llegues allí podrás visitar su pequeño museo naval. Y para aquellos que buscan aventuras más emocionantes, hay senderos que conducen desde el faro hasta la playa cercana de Gran Tarajal. Estos senderos ofrecen vistas impresionantes de la costa y del paisaje circundante, pero deben ser abordados con precaución ya que son bastante empinados y rocosos.
El Faro también es un lugar popular para los amantes de la fotografía. Desde el faro, se puede disfrutar de unas vistas espectaculares del océano y de la costa este de Fuerteventura. Además, en días claros, se pueden ver las vecinas islas de Gran Canaria y Lanzarote en el horizonte. Recomendado especialmente al atardecer, cuando el sol se pone detrás del faro y las rocas del acantilado se iluminan con tonos dorados y naranjas.
Por otra parte, también encontrarás una pequeña playa cercana al faro, conocida como Playa de la Entallada. Un lugar perfecto para relajarse y disfrutar del sol y el mar. Además, el faro es un punto de partida ideal para hacer excursiones en barco y explorar la costa este de la isla.
En definitiva, el Faro de la Entallada es una de las atracciones turísticas más impresionantes de Fuerteventura, y una visita obligada para los amantes de la naturaleza, la historia y la fotografía que no te puedes perder.
